Tras el Ángelus, el Pontífice también se ha acordado de las víctimas de los incendios en Los Ángeles
MADRID, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Papa Francisco ha bautizado este domingo 12 de enero en la Capilla Sixtina a 21 niños, todos hijos de empleados del Vaticano, en la fiesta del Bautismo del Señor. "Hoy mandan ellos y nosotros debemos servirles, con el Sacramento y con la oración", ha asegurado.
La impartición del Bautismo a los hijos de los empleados del Vaticano forma parte de una tradición instaurada en 1981 por Juan Pablo II, con un único cambio: los dos primeros años los bautizos tuvieron lugar en la Capilla Paulina, desde 1983 y hasta este año, en la Capilla Sixtina.
El Pontífice, que ha afirmado que lo más importante era "que los niños se sientan bien", ha señalado que los menores han recibido "el don más grande, el don de la fe". Los padres se han ido acercando al Papa para que sus hijos recibiesen la señal de la cruz en la frente.
En la celebración, las voces de la Schola Cantorum han sonado para los pequeños. "Que crezcan en la fe" ha sido el deseo del Pontífice para que los pequeños vivan "una verdadera humanidad en la alegría de la familias". Francisco ha pedido a los presentes que lleven siempre con ellos la luz y el recuerdo de este día.
"Y cuando haya algún problema, alguna dificultad, enciendan la luz para pedir al Señor la Gracia, para tu familia", ha manifestado. Junto al Papa han estado los concelebrantes, el cardenal Konrad Krajewski, limosnero pontificio, y el cardenal Fernando Vérgez Alzaga, presidente de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, que han marcado el pecho de cada niño bautizado con el óleo de los catecúmenos.
Posteriormente, el Papa ha impartido el Bautismo, bañando la cabeza de cada pequeño -acompañado de padres, padrinos y madrinas- con el agua bendita. La celebración ha continuado con el rito de la unción con el santo crisma, mientras que el cardenal Krajewski acompaña la señal sobre la cabeza de cada bautizado con una caricia.
Por su parte, el Cardenal Vérgez Alzaga ha entregado la túnica blanca, mientras que los padres han encendido su propia vela en la llama del cirio pascual. También se ha realizado el rito de 'Effata' (ábrete), que retoma el episodio del Evangelio de Marcos en el que Jesús cura a un sordomudo.
Los dos cardenales tocan, con sus pulgares, las orejas y los labios de los niños bautizados. Al final de la celebración, el Papa ha saludado a las familias de los bautizados y ha entregado un regalo a cada una de ellas.
RECUERDO A LAS VÍCTIMAS DE LOS INCENDIOS EN LOS ÁNGELES
En el Ángelus de la fiesta del Bautismo de Jesús, el Papa Francisco ha reflexionado sobre el significado del sacramento: la conciencia de ser hijos amados, y ha ensalzado la importancia del bautismo. "Es un día importante para grabar en nuestro corazón. Es el día en el que hemos renacido de la vida nueva", ha señalado desde el Palacio Apostólico.
El Santo Padre ha instado a los fieles a reflexionar sobre la decisión de Dios de revelarse a través de Jesús, estableciendo un lugar privilegiado para entrar en diálogo y en comunión con la humanidad.
En los llamamientos posteriores a la oración mariana, el Papa ha dirigido su pensamiento a los habitantes de Los Ángeles (Estados Unidos) que viven el drama de la huida por los incendios que asolan estos últimos días el oeste del país.
"Estoy cerca de los habitantes del condado de Los Ángeles, en California, donde en los últimos días se han desatado incendios devastadores. Rezo por todos ustedes", ha pronunciado.