MÉXICO, 23 Oct (EUROPA PRESS)
La NASA ha revelado un prototipo a tamaño real de seis telescopios que jugarán un rol crucial en la detección de ondas gravitacionales en el espacio durante la próxima década. Estos forman parte de la misión LISA (Laser Interferometer Space Antenna), emprendida junto con la ESA, para captar estas ondas, resultado de eventos astronómicos extremos como la fusión de agujeros negros, mediante una precisión inigualable usando láseres para medir distancias entre tres naves espaciales distribuidas en una formación que supera el tamaño del Sol. Cada lado de esta formación triangular medirá cerca de 2.5 millones de kilómetros.
"Los telescopios gemelos que se encontrarán en cada nave espacial se encargarán de transmitir y recibir rayos láser infrarrojos para monitorear el espaciado entre ellos, y la NASA proveerá los seis necesarios para la misión LISA", explicó Ryan DeRosa, investigador del Centro de Vuelo Espacial Goddard, en un comunicado. Este prototipo, denominado Telescopio de la Unidad de Desarrollo de Ingeniería, será fundamental en el proceso de construcción del equipo final que se enviará al espacio.
Este innovador telescopio fue diseñado y ensamblado por L3Harris Technologies en Rochester, Nueva York, y llegó a Goddard en mayo. Resalta por su espejo primario bañado en oro, optimizando la reflexión de los láseres infrarrojos y minimizando la pérdida de calor hacia el vacío espacial, lo cual es crucial ya que su desempeño es óptimo a temperaturas cercanas al ambiente.
Compuesto completamente por Zerodur, una vitrocerámica de color ámbar producida por Schott en Mainz, Alemania, este material fue escogido por su excepcional estabilidad dimensional a través de una amplia gama de temperaturas, siendo ideal para aplicaciones que requieren la máxima precisión como es el caso de los espejos de telescopio.
La misión LISA, con su lanzamiento programado para mediados de la década de 2030, promete abrir una nueva ventana al universo, permitiendo a los científicos estudiar eventos cósmicos hasta ahora imposibles de observar, acercándonos más a los misterios del cosmos gracias a esta tecnología punta.