MÉXICO, 28 Sep (EUROPA PRESS)
En Uganda, el empleo de drones equipados con tecnología de fotografía aérea está transformando los esfuerzos por conservar y proteger a especies en peligro, como el león africano, residente de varios parques nacionales del país incluyendo el renombrado Parque Nacional Queen Elizabeth. Estos majestuosos felinos, conocidos por su única habilidad para trepar árboles, son ahora monitoreados desde el cielo, permitiendo a los especialistas capturar imágenes detalladas de sus hábitos y comportamientos.
Los científicos y conservacionistas, encabezados por el biólogo de grandes felinos Alexander Braczkowski, enfrentaban desafíos significativos debido a la densa vegetación del hábitat de los leones, lo que complicaba el rastreo terrestre tradicional. La presencia de matorrales como el Acacia Sickle Bush obstaculizaba el seguimiento a pie y limitaba la posibilidad de observación directa.
No obstante, la adopción del dron Zenmuse H30T de DJI revolucionó estas prácticas. Comparado con modelos anteriores, este dron ofrece resoluciones de imagen hasta cuatro veces superiores, ampliando así las capacidades de los equipos de investigación para monitorizar con precisión no solo a los leones sino también a otras especies, incluso durante la noche. Como señala Braczkowski, esta mejora tecnológica les permite "ver los detalles de las arrugas de las orejas de un elefante o la textura de su piel por la noche".
Más allá de la simple observación, los drones juegan un papel crucial en la identificación de comportamientos específicos, como el apareamiento y la caza, que serían prácticamente imposibles de documentar sin esta tecnología debido a la obstrucción de la vista por la vegetación. Asimismo, esta innovación representa una herramienta valiosa contra la caza furtiva, capturando actividades ilegales en áreas donde la vigilancia en tierra es complicada por la ausencia de cercas o barreras físicas.
El potencial de los drones para aplicaciones de seguridad y conservación es especialmente notable en regiones de África Oriental, como Uganda, donde el paisaje abierto y sin vallas plantea desafíos únicos. Según Braczkowski, la colaboración con DJI ha sido esencial para avanzar en la investigación y los esfuerzos de conservación, destacando cómo la resolución mejorada y la capacidad de operación nocturna han abierto nuevas puertas para el conocimiento y la protección de la vida silvestre.