Publicado 26/06/2024 11:29

MÉXICO.- El mural de Rivera que resurgió de la censura

Archivo - Retratos de Frida Kahlo y Diego Rivera en el Altar del Día de los Muertos, dedicado a la pintora mexicana en la Casa de México para visitar, a 23 de octubre de 2022, en Madrid (España).
Archivo - Retratos de Frida Kahlo y Diego Rivera en el Altar del Día de los Muertos, dedicado a la pintora mexicana en la Casa de México para visitar, a 23 de octubre de 2022, en Madrid (España). - Jesús Hellín - Europa Press - Archivo

CIUDAD DE MÉXICO, 26 Jun. (Agencia Reforma) -

A 90 años de su develación en el Palacio de Bellas Artes, el mural El hombre controlador del universo, de Diego Rivera, protagoniza una exposición en el recinto que explica su origen como sobreviviente de la censura.

Titulada Diego Rivera, Nueva vida a un mural destruido, 1933/1934, la exhibición presenta una treintena de piezas, entre bocetos, estudios y material documental en distintos soportes, que se remontan años atrás de la hechura de la obra, para ponerla en contexto.

"Una exposición acotada que sintetiza esta historia que hay detrás de este mural", explicó este martes Miguel Álvarez Cuevas, curador de la muestra, en un recorrido.

"Es para profundizar y entender desde otras aproximaciones históricas, a través de documentos, fotografías, publicaciones e, incluso, algo muy interesante e importante para la historia de este mural, los primeros bocetos que realizó Diego Rivera para concebir y aproximarse a El hombre controlador del universo".

Dividida en dos salas del Palacio, la exposición se centra en un par de momentos clave para entender la historia de la obra: el viaje que el muralista realizó a Rusia en 1927 y la creación, censura y destrucción en 1933 del antecedente del mural en el Centro Rockefeller de Nueva York.

La primera sala muestra con dibujos, fotografías, reprografías, video y archivos de audio lo definitoria que fue la visita de Rivera a la Unión Soviética, invitado a las celebraciones por el décimo aniversario de la Revolución de Octubre.

"Es en donde Diego Rivera se empapa y se posiciona también política e ideológicamente y rescata, recupera, crea, una estética a partir de la sociedad moscovita que conoce en este décimo aniversario de la Revolución Rusa", detalló Álvarez Cuevas.

Con ello en mente, el visitante puede rastrear la estética y temas del mural de Bellas Artes hasta el propio cuaderno de Rivera, donde realizó numerosos dibujos y bocetos durante el viaje.

La segunda sala ahonda sobre la censura del mural que fue comisionado al artista para el Centro Rockefeller, inicialmente, con el tema "El hombre en la encrucijada y mirando con incertidumbre, pero con esperanza y visión elevada, la elección de un nuevo rumbo que lleve a un futuro nuevo y mejor".

Este antecedente del mural de Bellas Artes, pintado en 1933, fue destruido por los propios contratantes de Rivera luego de que éste incluyera en un sitio prominente la efigie del líder soviético Vladimir Lenin.

Entre las obras que explican este momento, destaca un par de fotografías de la artista Lucienne Bloch, que permanecen como único registro del avance del mural en el Rockefeller Center.

Ahí, el visitante también puede ver un boceto de 1932 que funge como el origen tanto del mural destruido como de la encarnación que finalmente puede visitarse en Bellas Artes, recinto que este año también cumple 90 años desde su fundación.

Una victoria final sobre la censura que, como explica la muestra, dio nueva vida a un mural que se había perdido para siempre.

Leer más acerca de: