Sheinbaum declara su preferencia por la opositora Luisa González en Ecuador
MADRID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de México, Claudia Sheinbaum, ha instado este lunes al Gobierno de Estados Unidos a "hacer su parte" en lo que respecta al tráfico y consumo de drogas en territorio estadounidense, uno de los motivos de fricción entre ambos países y por el cual Washington ha amenazado con imponer aranceles.
"Nosotros decimos que Estados Unidos tiene que hacer su parte para atender el asunto de salud pública de consumo de drogas y también atender la distribución de las drogas en su territorio", ha señalado la mandataria mexicana.
Sheinbaum ha explicado que es objetivo de su Gobierno reforzar la seguridad y hacer descender los índices de violencia en el país, a través de lo cual acabará cayendo también la producción de ciertas drogas y su distribución.
"Nosotros lo que queremos es paz y tranquilidad para el pueblo de México", ha dicho Sheinbaum desde su matutina rueda de prensa diaria. "Trabajamos diariamente para evitar la producción, la distribución y la violencia", ha remachado.
Asimismo, ha reiterado su postura de mantener la "cabeza fría" ante las amenazas arancelarias de su homólogo allá en la Casa Blanca, Donald Trump, de un 25 por ciento para las exportaciones del acero y el aluminio a partir de este lunes.
"Vamos a esperar a ver si anuncia algo y a partir de allí tomaremos nuestras definiciones", ha dicho.
RESPALDO A LA OPOSITORA LUISA GONZÁLEZ EN ECUADOR
En otro orden de cosas, Sheinbaum ha expresado su preferencia por la candidata de la oposición en Ecuador, Luisa González, para la segunda vuelta de las elecciones, tras la cita de este domingo, en las que quedó como segunda opción más votada, a apenas unas décimas por detrás del actual mandatario, Daniel Noboa.
"Ojalá en Ecuador pronto griten presidenta con 'a' y se puedan restablecer las relaciones", ha dicho, en referencia a la ruptura que se produjo tras el asalto de las fuerzas de seguridad ecuatorianas en abril de 2024 a la Embajada de México en Quito para detener al exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas.