Publicado 07/10/2024 09:45

Urge plan integral para Pemex y CFE

Archivo - Campo petrolífero
Archivo - Campo petrolífero - FLICKR - Archivo

Diana Gante

CIUDAD DE MÉXICO 06-Oct-2024 .

Para que los propósitos de transición energética de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Petróleos Mexicanos (Pemex) sean una realidad, es indispensable una estrategia integral en la que se consideren las debilidades de ambas compañías.

Isabel Studer, presidenta de Sostenibilidad Global, consideró que aún con las mejores intenciones, si no se tiene un plan puntual dentro de ambas empresas, no será posible transicionar.

"Creo que necesitamos otra narrativa sobre la transición energética, a veces nos quedamos en la atención de sectores muy tradicionales y estamos perdiendo de vista que hay un reacomodo en la manera en que entendemos la producción de nuevos bienes.

"Es necesario empezar a ver un cambio en el discurso y la narrativa en el papel de México en esta transformación", comentó en entrevista la semana pasada.

Uno de los retos para lograr la transición es la alta dependencia de combustibles fósiles.

"Nuestro sistema energético depende de más de 80 por ciento de los combustibles fósiles, por lo que necesitamos cambiar esa matriz energética y tener una visión de largo plazo para hacer esos cambios", puntualizó Studer.

El estudio "Desbloqueando la Transición Energética en México. El Papel de Pemex y CFE", de Sostenibilidad Global, expone que los esfuerzos de Pemex por invertir en la extracción y refinación de hidrocarburos y de CFE para la generación de electricidad no son suficientes para reducir la dependencia del País de la importación de combustibles fósiles.

"México depende en gran medida de los combustibles fósiles, que representan 86 por ciento de su suministro energético primario y 73 por ciento de la generación de electricidad.

"A pesar del aumento de la inversión pública en extracción y refinación de petróleo y gas de Pemex, y en la generación de electricidad de la CFE, especialmente en ciclos combinados, el País se ha vuelto cada vez más dependiente de las importaciones de gas, gas LP, gasolina, diesel y petroquímicos, predominantemente de los Estados Unidos", señala el documento publicado el pasado 18 de septiembre.

Dicha dependencia expone a México a riesgos relacionados con la volatilidad de los precios del petróleo y la disponibilidad de recursos energéticos