MÉXICO, 26 Jul (EUROPA PRESS)
Este sábado, a las 11:00 horas, en el Stade Pierre-Mauroy de Lille, Francia, la selección española masculina de baloncesto arranca su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024 enfrentándose a un desafío de alta exigencia contra Australia. Este partido marca el inicio de una ruta que también enfrentará a España contra potencias como Grecia y Canadá, todas en búsqueda de un boleto a los cuartos de final en un grupo considerado como posiblemente el más complicado en la historia olímpica.
A pesar de ser la actual campeona de Europa y de contar con un impresionante historial de éxitos internacionales, España se posiciona al final en las casas de apuestas de este torneo. La selección, dirigida por Sergio Scariolo, no tuvo suerte en el sorteo, pero está acostumbrada a los desafíos, como lo demuestran sus medallas obtenidas en los juegos de Pekín 2008, Londres 2012, y Río de Janeiro 2016.
Sin embargo, los últimos años han sido testigos de una pérdida de calidad individual y potencial debido a un cambio generacional. Aunque ha logrado mantener el legado de figuras icónicas como los hermanos Gasol, Navarro, Rodríguez, y Rubio, alcanzar el podio se ha vuelto cada vez más complicado. Pese a este panorama, España logró alzarse con el oro en el Europeo de hace dos años, aunque no llegó a lo más alto en el Mundial de 2023.
De cara a París 2024, y tras tener que clasificarse en un Preolímpico por primera vez en 36 años debido a su actuación en el último Mundial, España se prepara para demostrar de nuevo su capacidad competitiva y su estilo de juego en equipo. La preparación de verano ha sido positiva, destacando jugadores como Santi Aldama, Usman Garuba, Willy Hernangómez, y el regreso de Lorenzo Brown. A pesar de algunos problemas físicos de Juancho Hernangómez y Álex Abrines, veteranos como Rudy Fernández y Sergio Llull se preparan para sumar su experiencia al equipo.
Por otro lado, Australia, con ganas de revancha tras obtener el bronce en Tokyo 2020, presenta un equipo formidable. El talento de jugadores como Patty Mills, Joe Ingles, y la joven promesa Josh Giddey pone a Australia en una posición de serio contendiente, prometiendo una dura competencia.
Este encuentro no solo es crucial por la rivalidad de ambos equipos, sino por las implicaciones que tiene en el avance hacia los cuartos de final. Cada victoria en el Grupo A añade no solo puntos, sino también expectativas y sueños en el camino hacia el podio olímpico.